Hay más de dos mil familias evacuadas y la situación climática no mejoraría en los próximos días.
La temporada de lluvias en Bolivia acumula por lo menos 17 muertos desde noviembre, luego de que se conocieran cinco fallecimientos más en las últimas horas.
El último reporte fue sobre una menor de La Paz que cayó por el desplome de su casa. En Tiquipaya, en tanto, fallecieron otras cuatro personas por un alud de barro que derribó 20 viviendas.
“Tenemos registrados 8,224 familias afectadas a nivel nacional. Las lluvias no ceden“, informó el ministro de Defensa, Javier Zavaleta, en rueda de prensa. En las próximas horas se espera un desborde del río Beni, en el norte boliviano, que podría provocar grandes pérdidas económicas.
Las casi dos mil familias damnificadas por inundaciones se registraron en municipios de La Paz, Tarija, Chuquisaca, Cochabamba y Potosí. En la víspera, el presidente Evo Morales declaró estado de emergencia para disponer de fondos para atender a los damnificados.
