El analista político habló sobre la situación del futbol argentino que, según las hinchadas, están vinculadas con el poder del Presidente por su pasado y fanatismo por Boca.
Crece la repercusión de los insultos en los diferentes estadios de fútbol contra el presidente Mauricio Macri aludiendo que sus influencias políticas tienen poder en el liderazgo de Boca en el campeonato local. Por lo que ante este presente, el secretario General del SADRA, Guillermo Marconi aseguró que existe la posibilidad de suspender aquellos partidos en donde suenen cantos insultando al Presidente de la Nación.
En una mirada política, el analista político y director de Opina Argentina Facundo Nejamkis le quitó dramatismo y sostuvo que “no me parece que sea un fenómeno al que haya que sobre dimensionar. Es parte del folclore y lo circunscribiría a esa situación”.
En diálogo con Ventana Abierta por FM Milenium manifestó que “el inicio de los insultos a Macri en los estadios tiene connotación futbolística. El fútbol siempre está teñido de sospecha” y reflexionó que “en la Argentina se insulta a árbitros, jugadores y no habría por que esperar que las figuras políticas estén exentas de eso”.
Por lo que, haciendo un análisis más político Nejamkis señaló que “si fuese Presidente estaría preocupado por otras cosas y no por un fenómeno que surge en un estadio de fútbol”. En ese plano subrayó que “el Gobierno ha decidido este año sacrificar parte de su imagen para tomar medidas que resultan antipáticas”.
“El gobierno debe estar tratando que su imagen no caiga más de lo que ellos estiman que debería caer”, expresó y dijo que de acuerdo a los resultados de la última encuesta realizada en Opina Argentina “la imagen positiva del Gobierno ronda el 42%. No se ha profundizado la caída pero no son los ideales”. “En términos de imagen todavía se sostiene una imagen positiva alta de algunos funcionarios, como Vidal”, detalló.
Además, si bien reconoció que “hubo una caída de la imagen fuerte luego de la reforma previsional, ahora esa se estabilizó”. En cuanto al debate que se estableció sobre la discusión de la despenalización del aborto, el analista indicó que “una sociedad no se compone solamente de cuestiones económicas y que es positivo que el tema del aborto se pueda discutir”. Por lo tanto, dejó en claro que “no cuestionaría el por qué el Gobierno trata el tema aborto ahora. No pensaría si lo hace para distraer a la sociedad ya que no es un tema menor”.
